sábado, 31 de marzo de 2012

Sanhedrín 48 - Hanaat Hamet

Quien teje una prenda para un muerto... Así comienza nuestro tema de estudio de hoy. Abaie considera que si alguien tejió cualquier prenda de ropa con el fin de que la use una persona que, finalmente falleció, queda prohibida de ser usada por cualquier otra persona, mientras que Raba permitía su uso. Un poco de contexto y de algún que otro dato vendrían bien. La Halajá prohíbe lo que se denomina "Hanaat Hamet", tener provecho/goce/usufructo u algo similar del muerto. Nada de lo que el muerto tenga en el momento de fallecer puede ser vendido, o incluso, usado por otra persona. Por ejemplo si una persona al fallecer tiene puesto un reloj Rolex el mismo no puede ser vendido, al muerto se lo debe enterrar con ese reloj en el ataúd o bien se lo debe tirar. El principio general es que no se puede tomar provecho de un muerto. La cuestión es ¿Qué pasa con una prenda que estaba siendo cosida para él pero que nunca llegó a usar? ¿Pueden otras personas tener disfrute de aquella prenda? Para Abaie no ya que la designación es un acto material. Según su visión si yo le designé verbalmente algo a alguien esa cosa ya está en su dominio por lo cual los otros no pueden tener disfrute de aquello. Por el contrario Raba comprende que la designación no es un acto material por lo cual si el fallecido no utilizó la prenda cualquier otra persona la puede utilizar.

Los Tefilin (filactérias): En una discusión similar Rab Jisda sostiene que si se confeccionó una bolsa para ser usada para envolver los Tefilín y la misma fue finalmente usada no puede ser luego usada para otro fin, si no fue utilizada puede ser usada para guardar monedas por ejemplo. Abaie sostiene aquí el mismo principio que anteriormente aprendimos, si algo fue designado para tal o cual uso, posteriormente no puede ser usado para otro cualquiera. La cuestión y la disputa llega a una resolución con la siguiente enseñanza de los sabios: Si una persona le pide a un artesano que le prepare un cobertor para la Torá o un recipiente para poner sus Tefilin, antes de ser usados para estos fines sacros pueden ser usados para cuestiones "seculares-profanas", pero en el momento de que se usan por primera vez para asuntos sagrados nunca más pueden ser usados para cuestiones profanas. Esta afirmación de los sabios tira abajo los argumentos de Abaie ya que acá vemos en que hay una diferencia entre la designación y el uso per se

lunes, 26 de marzo de 2012

Sanhedrín 47 - Sobre muertos

Repasemos en pocas palabras lo que ya venimos estudiando. Una vez que alguien es juzgado, encontrado culpable, conducido a su muerte y finalmente muerto ¿Qué sucede? La muerte, en todas las culturas, está rodeada por una serie de rituales, mitos y costumbres que ayudan a los vivos a enterrar (física y espiritualmente) a sus finados. Algunas costumbres enfatizan el hecho de olvidar al difunto, otras a tenerlo presente todo el tiempo. El judaísmo, a lo largo de la historia ha confeccionado diversas costumbres y tradiciones con respecto al muerto. En nuestra Guemará, a raíz que se habla de que los culpables son muertos por el tribunal, se nos informa de algunas costumbres que había en aquella época. Veamos algunas de ellas. 

Principio general. La columna vertebral sobre el tratamiento a un muerto, ya sea un justo o un malvado, un judío o un no judío es el de "Kavod HaMet", el honor que se le debe dar a un difunto. El contrario de Kavod HaMet es "Bizui HaMet", el desprecio al difunto. En nuestra Guemará, por ejemplo, se nos dice que si una persona fue colgada luego de su sentencia de muerte (por haber cometido idolatría, como uno de los casos) no se lo debe dejar pasar la noche colgado ya que aumentará su humillación y su cuerpo comenzará a descomponerse lo que se considera un "Bizui HaMet". Presentando esto, la Guemará nos trae una halajá general: Inmediatamente cuando alguien fallece se debe hacer "hasta lo imposible" para enterrarlo a la brevedad, no obstante uno puede demorar el entierro, un día o más, si es para esperar que se construya el cajón o que familiares del exterior vengan a enterrar a su muerto. 

Justos y malvados. La Mishná nos dice que a los malvados (los que son muertos por un tribunal) no se los debe enterrar junto a sus familias, sino que deben ser enterrados en un lugar especial. La Guemará se pregunta cuál es el motivo y llegan a la conclusión de que no se deberían enterrar a justos con malvados. Si lo leemos al pasar, nos puede resultar chocante la afirmación de nuestros maestros, esta "discriminación" tan evidente pero en realidad a quien le gustaría ir a visitar a algún familiar al cementerio y que al lado de su tumba (kevurá) esté la tumba de un asesino, un violador o un dictador. Incluso la Guemará nos dice que se hacían dos secciones diferenciadas de malvados. Por un lado los que eran muertos por decapitación o ahorcados y por el otro los que morían por "fuego" o lapidados, ya que dentro de los malvados están los más malvados que su muerte es más dolorosa (como es el caso de los que son lapidados) y otros que son "menos malvados" y que sus muertes son menos - o al menos así lo piensan los sabios - dolorosas.

Un detalle más al respecto: Los malvados podían ser, luego de un tiempo, enterrados junto a sus familias. Una vez que quedaban únicamente los huesos en el ataúd se podía desenterrar el cofre y llevarlo junto al ataúd de sus familiares. Hoy en día está casi totalmente prohibido desenterrar a un muerto porque se lo considera Bizui HaMet, excepto para casos de autopsias o para enterrar el cuerpo en Israel. 

Onen vs. Avel. Cuando una persona está de duelo se lo llama un avel (avelim en plural), estas personas deben permanecer en la casa, no cortarse los cabellos, como también realizar otras tantas ceremonias "fúnebres". Todas estas costumbres que realizamos cuando un familiar cercano fallece no aplican si uno de ellos es muerto por el Beit Din. La avelut (las prácticas de los deudos) comienzan en el momento que la persona es enterrada, antes de aquel momento al deudo se lo denomina "onen". Estas personas no tienen que realizar públicamente ninguna de las practicas previamente mencionadas ya que la aninut es sólo del corazón. El dolor, la desesperanza, la tristeza y tantas otras cosas que uno siente cuando un ser querido fallece son las primeras emociones que brotan al enterarnos de su muerte, en ese momento la persona se convierte un onén y el duelo sólo es del corazón, sin prácticas rituales preestablecidas. La aninut, en contraposición a las leyes de avelut, sí las pueden realizar los familiares de un "malvado" muerto por un tribunal ya que son sentimientos que no se pueden controlar ya que se hayan en las profundidades del corazón. 

domingo, 25 de marzo de 2012

Sanhedrín 46 - Los colgados

Luego del juicio, las deliberaciones y la sentencia de los jueces, si el hombre o mujer, es hallado/a culpable se lo apedrea como vimos en los días anteriores. ¿Qué pasa después de que el condenado ha muerto? ¿Qué se hace con su cuerpo? Nuestra Mishná y Guemará discutirán si los hombres/mujeres son colgados, como lo hacían los antiguos imperios, o no. Rabi Eliezer plantea que todo aquel que es lapidado luego es colgado. Los sabios, en cambio, nos informan que sólo los que blasfeman a Ds y  aquellos que cometen idolatría son colgados, ya que éstos son los pecados más importantes que desacralizan a Ds y al pueblo judío.

Recordemos que el colgar a un muerto tiene dos finalidades: la humillación pública del transgresor que trae como "señal" para que ningún otro hombre o mujer quieran imitar las acciones de aquel transgresor. Rabí Elizer sostenía que a los hombres se los cuelga mirando para el pueblo y a las mujeres mirando al árbol, por un tema de recato, mas los sabios dicen que las mujeres en ningún caso son colgadas (y así queda la halajá).
La discusión entre Rabí Eliezer y los demás sabios gira en torno a cómo ambos aprenden y estudian dos versículos de la Torá. Uno de los versículos habla que si una persona comete un pecado debe morir y debe ser colgado (Devarím 21:22), el otro versículo nos dice que quien blasfema al nombre de Ds debe ser colgado (Devarim 21:23). Los sabios los estudian como si el primer versículo es un genérico que luego va a dar sus especificaciones y a indicar quiénes son esos que pecan que deben ser colgados: únicamente los que cometen idolatría y los que blasfeman el nombre del Eterno. Rabí Eliezer estudia los versículos de manera diferente: considera que vienen a aumentar y a disminuir, el segundo simplemente aumenta la especificidad del primero por lo cual según su visión todos los trasgresores deben ser colgados como "por ejemplo" los que blasfeman el nombre de Ds. La halajá queda como los sabios. 

¿Y el caso de las mujeres? Como dijimos la discusión queda zanjada y son los sabios los que se llevan la victoria, las mujeres, sea cual fuere su transgresión no son colgadas. No obstante se nos presenta una contrargumentación a esta postura. Se nos dice que Shimon Ben Shetaj colgó en un mismo día a 80 mujeres. Esto quería decir que hay una tradición existente dentro de Israel que las mujeres pueden, al igual que los hombres, ser colgadas. Los sabios discuten y dicen que esto no puede ser traído como una prueba porque lo que hizo Shimon Ben Shetaj estuvo fuera del orden establecido por la Torá, ya que ni las mujeres pueden ser colgadas ni se puede juzgar más de un mismo caso de pena capital en el mismo día. Entonces ¿Por qué actuó de esa manera el sabio Shimon Ben Shetaj? Para ponerle un Siag (cerco) a la Torá. Al parecer esas mujeres eran promiscuas y atentaban contra la dignidad del pueblo de Israel entonces Shimon Ben Shetaj decidió dar un mensaje a toda la comunidad de Israel colgando a estas mujeres. Lo mismo ocurrió según la Guemará en los tiempos de los griegos donde una persona estaba montando un caballo en Shabat (andar en caballo en Shabat está prohibido pero no está condenado con una pena capital), los sabios decidieron traerlo a juicio y colgarlo ya que en esos tiempos había muchos judíos que estaban desacralizando y profanando el Shabat. En definitiva estas muertes no son la norma sino más bien una advertencia para que otros no imiten sus actos. 

Objeciones e indicaciones: ¿Cómo se colgaba al condenado? Al parecer de un árbol con sus manos atadas colgando desde una rama del mismo. Como veremos a continuación la idea de colgar a un muerto aparenta no ser muy bien vista por la tradición judía, quizás fue una adopción de prácticas de otros pueblos pero nunca fue del todo bien recibida por los sabios. Se nos dice que una vez que se lo cuelga, inmediatamente debe ser bajado, si el muerto pasa la noche colgado se lo considera como si estuviésemos traspasando un mandamiento negativo, ya que es una maldición para Ds, una profanación de su nombre que un muerto sea despreciado de tal manera. Rabí Meir nos enseña que cuando una persona sufre la Shejiná (la presencia divina) se lamenta y dice "mi cabeza duele, mi brazo duele...". Si Ds, dicen los sabios, se lamenta por el dolor y la muerte de un malvado, como es el caso de alguien que está siendo colgado, cuánto más lo hace cuando fallece un justo!

Una analogía. Rabí Meir enseñaba su visión a través de la siguiente parábola: dos gemelos que viven en una misma ciudad, uno se convirtió en Rey y el otro en un ladrón. El rey comanda que el ladrón sea colgado, cuando es colgado todo el mundo dice: el rey está siendo colgado. Inmediatamente el rey pide que bajen a su hermano gemelo de allí. El rey, en este caso es Ds, y su hermano gemelo, el ladrón (ya que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Ds) nos demuestran que Ds es degradado cuando una de sus criaturas es degradada al ser colgada y humillada en público. Ds es degradado como el rey era degradado cuando la gente pensaba que era él quien estaba colgado. El nombre de Ds es degradado y humillado cuando una de sus criaturas, creadas a su imagen, es degradada y humillada. 

El entierro. Los sabios, aprenden de un versículo de la Torá que el entierro (la kburá) es una mitzvá de la misma Torá. Enterrar a un muerto directamente en la tierra o con un ataúd no totalmente cerrado, tiene según los sabios, un origen en la misma Torá. En la Torá en diversos momentos se nos dice que un miembro del pueblo de Israel es enterrado. Son conocidas las historias de los entierros de Abraham, de Sará o bien de Aharon o su hermano Moshé.

Un último tema. El Esped (los discursos fúnebres) que se hace en el momento del entierro ¿A quiénes está dirigido? ¿Está dirigido a los vivos, a los familiares y amigos del muerto? o bien ¿está dirigido al muerto? Luego de una gran discusión los sabios dictaminan que el Esped debe estar dirigido al muerto para darle kavod (honor) a él. No debe servir directamente para consolar a los familiares sino para engrandecer, enaltecer y honrar la vida del difunto. 

sábado, 24 de marzo de 2012

Sanhedrín 45 - Procedimientos de la Skilá

Habíamos establecido que cuando el condenado se encuentra a 10 amot (codos) del lugar de su ejecución debe confesar por sus pecados. Ahora una nueva Mishná nos dice que cuando el condenado esta a 4 amot del lugar donde será ejecutado debe ser desvestido, se le debe sacar sus ropas. Los sabios dicen que los hombres son ejecutados totalmente desnudos mientras que las mujeres son ejecutadas estando cubiertas. ¿Cuál es el motivo de esta diferencia? Los sabios talmúdicos dan varias conjeturas trayendo diversos versículos bíblicos pero al parecer tiene que ver con los hirurim, nuestros maestros sospechaban que si unos hombres veían a una mujer desnuda iban a tener pensamientos obscenos ya que como enseña Rabá "el Ietzer Hará (instinto del mal) no domina sobre el hombre sino por cuanto lo que ven sus ojos". La pregunta que yo siempre me hago en estos casos, y disculpen el lenguaje, es: y las mujeres ¿no pueden tener pensamientos sexuales al ver a un hombre desnudo? Para los sabios talmúdicos podríamos decir que no. 

Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Rabi Akiva, enseña en otra parte del Talmud, que este principio es el más grande de toda la Torá. Nuestros sabios toman este versículo y le dan aquí, en este contexto, un significado diferente. ¿Qué significa amar al prójimo como a uno mismo? Elegir para él una buena muerte. Si una persona debe sufrir un castigo por el error que cometió nuestra tarea como prójimo es que sea "lo menos dolorosa" posible. No nos vayamos tanto a las penas de muerte, que muchos de nosotros criticamos y buscamos su completa abolición, pensemos más en los criminales, en los jóvenes que delinquen por necesidad o por no conocer otra realidad y los mandamos por años a cárceles mugrientas, oscuras, húmedas y sin posibilidad de rehacer sus vidas. Eso es castigarlos doblemente. Castigarlos por su error, que sin duda debe ser castigado, pero de una manera cruel, de una manera dañina.   

Skilá: La lapidación es la pena de muerte bíblica que los sabios consideran la más "fuerte". Ahora en una nueva Mishná nos enseñan cómo se llevaba a cabo esta sentencia en el antiguo Israel. El Beit HaSkilá tenía la altura de dos personas, digamos así como unos 4 metros. Uno de los testigos debía arrojar desde esa altura al condenado con su corazón mirando al suelo. Si este moría, el testigo salía de la obligación ya que la Torá establece que el mismo que da testimonio debe ser el primero en terminar con la vida del sentenciado. Si este no muere con la caída, el otro testigo debe arrojarle una piedra, si este muere, el testigo cumple con su obligación, si no muere, en cambio, todo el pueblo debe apedrearlo, para así cumplir con el decreto bíblico. En el tratado de Baba Kama se nos dice que un pozo que tiene diez tefajim, algo así como un metro, tiene el potencial de matar a una persona; por ende algunos sabios dicen que ese debe ser la altura que debe tener el Beit HaSkilá. Los sabios utilizando nuevamente el concepto de amar al prójimo buscándole una "muerte digna", dicen que si alguien cae de tan solo un metro seguramente no muera por lo cual debe ser más alto. Entonces ¿Por qué no lo hacen de 10 metros o más? Porque así la persona a la caída, según los sabios, perdería sus miembros y eso no es exactamente una "buena muerte". Recordemos que antes de que el hombre sea arrojado se lo embriagaba para que no sufra tanto la caída.  

jueves, 22 de marzo de 2012

Sanhedrín 44 - Aján y Ioshua

Al final de nuestro estudio en el día de ayer vimos que a quienes están por ser sentenciados a una pena capital se los incita a que realicen la confesión, el Vidui; ya que la muerte, según la tradición de Israel, expía las transgresiones que cometemos en este mundo. Nuestra Guemará discutirá hoy el origen de esta idea del Vidui antes de partir del mundo terrenal. La tradición, dicen los sabios, se aprende de un hecho que ocurre en los primeros capítulos del libro de Ioshua. Este libro que es el inmediatamente posterior a la Torá narra la conquista del pueblo de Israel sobre Knaan, las batallas y victorias militares que fue consiguiendo el pueblo de Israel, comandado por Ioshua. D´s había ordenado que al ir a la guerra contra las ciudades y los pueblos cananeos todo, absolutamente todo debía ser destruido. No podía quedar rastro de aquellos pueblos y de sus culturas paganas. Ocurrió cierta vez que un hombre llamado Aján en vez de cumplir esta orden divina decidió tomar para sí parte del motín de guerra luego de conquistar una ciudad. Ds se enojó con Ioshua y con el pueblo de Israel en ese momento y decidió no acompañarlos más en la batalla. Por un tiempo el pueblo de Israel perdió muchas batallas ya que la presencia Divina se había apartado de ellos. Todo por culpa de Aján. Finalmente D´s decide mostrarle a Ioshua la causa del mal y le dice lo que Aján había hecho. Ioshua lo recrimina y dice que será castigado con la muerte pero le dice que está "sucio en este día". Los sabios entienden esta frase como que está lleno de pecados (en el mundo terrenal, en el Olam Haze) mas que luego de su muerte y su confesión no estará más sucio (o sea estará libre de pecados) en el mundo venidero (Olam Habá). De esta historia nuestros sabios aprenden que la confesión, el arrepentimiento sincero, y la muerte liberan al hombre de sus pecados. 

Habíamos comentado en el día de ayer que Rabí Iehudá sugería que si una persona sabía que había sido falsamente acusada debía confesar antes de ser ejecutada pero debía aclarar que no confiesa "por este pecado" ya que él no lo cometió. Los sabios, la gran mayoría de ellos, sostienen que el acusado no debe decir esta frase complementaria ya que por un lado generará que se digan habladurías y que se hable mal del Beit Din (por supuestamente haber sido acusado y condenado de manera injusta) y por el otro lado también porque sino todo los acusados, incluso los que fueron condenados correctamente, también lo dirán para "limpiarse a si mismos".

Aforismos y enseñanzas talmúdicas:

Es más grande el estudio de Torá (Talmud Torá) que el sacrificio diario (temidin), enseña Rab.

Rabí Eleazar nos enseña que el hombre siempre debe adelantar la Tefilá (oración) al sufrimiento.

Por último nos dice Reish Lakish en esta serie de aforismos que todo aquel que se esfuerza en la Tefilá en la tierra no recibe males desde los cielos. 

miércoles, 21 de marzo de 2012

Sanhedrín 43 - Ieshu HaNotzri

Kulan Mishel Tzibur: El Talmud continúa con las discusiones en torno a las penas de muerte. Su forma de aplicación y sus especificaciones. En esta oportunidad se discute un tema menor, pero no por eso menos importante, ¿Quién paga los costos? En un juicio de Dinei Nefashot si el acusado es hallado culpable ¿quién paga el caballo, el pañuelo, las piedras, etc.? Unos dicen que el condenado debe asumir los gastos de "su propia muerte" ya que tanto el pañuelo y el caballo pueden ser usados para su salvación, si es que se encuentran nuevos testigos. Otros sabios nos dicen que en realidad como la condena es hecha por la corte es el Tzbiur, la comunidad, quien debe afrontar los gastos. Y así se fija la Halajá, los gastos en los casos de la pena de muerte corren por parte de la comunidad local. Para enseñarnos esta ley nuestros maestros nos traen una costumbre de la época. Las mujeres más refinadas de Ierushalaim traían vino para el acusado para que este tomase antes de morir, se emborrache,  y no sufra tanto la ejecución. Aunque en nuestros días condenamos la pena de muerte, o por lo menos yo lo hago, es interesante pensar cómo nuestros sabios al aplicar la ley trataban que la persona que iba ser ejecutada sufra lo menos posible.

Nueva Mishná. Cuando un hombre es declarado culpable lo llevan del Beit Din (tribunal) a su lugar de ejecución. Un hombre debía salir a la calle y gritar: "Fulano hijo de Mengano va a ser ejecutado por traspasar tal o cual prohibición, si alguien tiene pruebas de su inocencia, que venga y declare". Si alguien aparecía y decía que tenía pruebas de su inocencia se agitaba el pañuelo (que estudiamos en la Guemará de ayer) y la persona a caballo salía rápidamente para detener la ejecución y reanudar el juicio. 

Ieshú HaNotzri. En nuestra Guemará aparece un personaje más que interesante: Jesús, el mismo aparece en diversas oportunidades a lo largo del Talmud, como se podrán imaginar, sin encontrar una gran simpatía por parte de los rabinos. En este caso se cuenta la historia donde Jesús, Ieshu (su nombre en Ivrit era Ioshua - el salvador), fue colgado y ejecutado en las vísperas de Pesaj. 40 días antes el hombre que debía anunciar que Ieshú iba a ser ejecutado salió a la calle y dio el anuncio como ordena la Mishná ¿Qué paso? Nadie, ni una sola persona en 40 días, se presentó para alegar en favor de Jesús. O por lo menos así nos lo cuentan los sabios!

Nueva Mishná. Nuestras Mishnaiot comienzan a partir de ahora a describir cómo son los momentos finales del condenado en este mundo. Cuando está a diez codos (unos cuatro metros) del lugar de su ejecución deben decirle que "confese" que haga su Vidui. El Vidui es la confesión final donde uno declara ante Ds que ha pecado. ¿Por qué el hombre debe confesarse? Porque quien se confesa, dice nuestra Mishná, tiene un lugar en el Olam Habá (mundo venidero). En un tratado donde se habla sobre la pena de muerte y el fin de la vida en este mundo los sabios ven la necesidad de incluir la noción de un mundo venidero, de una realidad futura que acontece cuando salimos de este mundo. Por más que hayamos errado, que hayamos cometido pecados, si al final de nuestros días hacemos una confesión sincera de nuestras culpas, los sabios nos dicen que nos aseguramos un lugar en el Olam Habá. ¿Cuál es la formula de la confesión? Tehé mitati Capará al kol avonotai - que mi muerte redima todas mis transgresiones. Rabí Iehuda discute y nos dice que si una persona sabe que fue acusada falsamente debe decir la frase anterior mas debe agregarle "jutz meavon ze - salvo por este pecado". Esto es algo que luego los sabios discutirán como veremos mañana. 

martes, 20 de marzo de 2012

Sanhedrín 42b - últimos alegatos

BH estamos comenzando un nuevo capitulo del tratado de Sanhedrín. Con paso firme seguimos recorriendo, sin prisa pero sin pausa, las más de 2700 hojas del Talmud. Comencemos el estudio del sexto capitulo del presente masejet

Ya se discutió cómo eran los juicios, cómo se presentaban los alegatos, cómo discutían los jueces, etc., ahora la Guemará nos informa cómo son los procedimientos una vez que se decretó que alguien es culpable. Una vez que alguien es encontrado culpable se lo saca del tribunal de justicia para ser lapidado - skilá (si es este el tipo de muerte que le corresponde por su transgresión) -, aquí se anuncia este tipo de muerte por ser considerada la más dura pero debe ser entendida como un genérico. Se lleva al condenado hasta la casa de la lapidación que debe quedar fuera y a una distancia prudencial del Beit Din. Un hombre debe ponerse en la puerta del tribunal agitando un pañuelo y un hombre a caballo se debe poner a cierta distancia entre el Beit Din y el Beit HaSkilá (casa de la lapidación). Si un hombre que pasa por allí grita "tengo evidencia de que este hombre es inocente" el que sostenía el pañuelo lo debe agitar y el que estaba montado a caballo debe galopar hasta donde la persona será muerta para impedir que esto suceda y llevarlo devuelta al tribunal. Este procedimiento se efectúa con el fin de que si una persona va a ser ejecutada por un tribunal humano no quede la menor duda de que es 100% culpable de su transgresión. El procedimiento se puede repetir varias veces, siempre y cuando haya peso en las palabras de los nuevos testigos. 

Distancias: Como dijimos, el Beit HaSkilá debe estar alejado y no contiguo al Beit Din. Si nos ponemos a pensar hemos visto muchas veces, en películas por lo menos, que las ejecuciones se llevan al lado o muy cerca del tribunal donde se sentenció al reo. La Guemará nos dice que el motivo por el cual el Beit HaSkilá tiene que estar lo suficientemente alejado del tribunal, a tres campamentos de distancia (en medidas talmúdicas) es por un lado para que los jueces no vean al reo siendo ejecutado, ya que como explica Rashí en Makot 7a se nos dice que un tribunal que condena a alguien a muerte incluso una vez en 70 años es considerado un tribunal "asesino", y los sabios no quieren que los jueces se sientan culpables o que quizas tuerzan el juicio y lo liberen aunque debería ser condenado para no sentirse culpables. Por el otro lado el Beit HaSkilá debe estar lo suficientemente lejos como para que haya tiempo, entre que lo sacan del tribunal y lo llevan ahí, a que aparezca alguien para presentar pruebas a su favor y así salvarle la vida. 

lunes, 19 de marzo de 2012

Sanhedrín 41/42a - Kidush HaLevaná

Nuestra Guemará retoma el concepto que vimos los días anteriores de Hatraá. Se enfoca principalmente en que si una persona no declara públicamente que es consiente que su transgresión le provocará la muerte, o un castigo físico, esta persona no puede ser castigada. Una persona para ser penada y condenada a muerte debe ser totalmente consiente de que su transgresión conllevará tal o cual pena, si aún así decide trasgredir la Torá entonces recién en ese momento puede ser condenado a muerte. Rabi Iosi enseña que un Talmid Jajam, un estudioso de la Torá, no necesita de esta Hatraá (advertencia) ya que suponemos que sabe cuáles son las cuestiones permitidas y cuales son las cuestiones prohibidas. Si se lo advierte le quitamos la posibilidad de que pueda aducir que la transgresión que cometió fue "sin intención" - Bishgagá

La destrucción del Beit Hamikdash causó una revolución al pueblo judío nunca antes vista, solo asemejada al exilio babilónico. Desde el día que la casa del Eterno fue destruida por los romanos en el año 70 d.e.c la vida judía nunca volvería a ser como supo ser por más de un milenio. Nuestra Guemará nos enseña que desde el día que se destruyó el Beit Hamikdash se anularon los Dinei Nefashot de Israel. La gran corte de Israel funcionaba en uno de los salones del Beit Hamikdash, cuarenta años antes que este fuera destruido el Sanhedrín fue trasladado a la ciudad de Janut, pero desde el día que se destruyó la Casa de Ds, la posibilidad de los jueces de ejecutar a otro ser humano fue anulada. Los sabios entienden que los jueces no tienen la capacidad intelectual ni espiritual, lo suficientemente elevada, para decidir sobre la vida y la muerte de los demás hombres. 

Kidush HaLevaná. En nuestra Mishná habíamos visto que si dos testigos atestiguaban que lo que vieron sucedió en dos días diferentes, por ejemplo uno dice que ocurrió el 2 y otro el 3, aún así su declaración puede ser válida porque en la antigüedad la fijación de los meses podía demorar y la gente solía equivocarse con respecto a los días. Esto le da pie a nuestros sabios para discutir la tradición de "Kidush HaLevaná", la santificación de la luna. Es una costumbre difundida por todo Israel la de santificar a la luna mes tras mes. No veneramos a la luna sino que a través de su contemplación alabamos el poder del Creador, que con su mandato hace suceder las estaciones y renovar, mes tras mes, ese "pequeño" satélite natural del cielo. Los sabios discuten hasta qué momento del mes se puede santificar la luna, unos dicen 7 y otros dicen 16. Ganan los segundos. La costumbre difundida es que la santificación de la luna se haga en la salida de Shabat antes de la mitad del mes, cuando la luna se encuentra llena, en todo su esplendor. Se leen unos salmos, unos versículos bíblicos pero lo más importante es la bendición que debemos hacer estando de pie. La misma es "Baruj Mejadesh Jodashim" - Bendito aquel que renueva los meses. Rabi Iojanán enseña que quien bendice al nuevo mes en su tiempo correspondiente es como si recibiera sobre él la presencia de la Shejiná

Hadrán Alaj Haiu Bodkin, Volveremos a ti "Haiu Bodkin".
Así concluimos este pequeño quinto capitulo del tratado de Sanhedrín. 

domingo, 18 de marzo de 2012

Sanhedrín 40 - Procedimientos judiciales

Estamos comenzando el quinto capítulo del tratado de Sanhedrín que sigue la misma trama que de los anteriores prestando más detalles sobre cómo se definen los juicios, cómo se examinan a los testigos y cómo estos procedimientos son llevados acabo. Sin más preámbulos, continuemos nuestro estudio. 

A los testigos en casos de Dinei Nefashot se les hacen, según la Mishná, siete preguntas. Se les pregunta ¿En que año ocurrió tal hecho? ¿Qué mes? ¿Qué día? ¿Qué hora? Etc. Luego los sabios nos dicen que quien agrega preguntas, a estas ya pre-determinadas, sobre él debe caer la gloria (harei ze meshubaj). Luego de que se termine el interrogatorio introducen al segundo de los testigos, ya que debemos recordar que en los Dinei Nefashot y Mamonot el testimonio de un solo testigo nunca es válido para condenar a alguien. Si las declaraciones de uno y otro coinciden se abren las discusiones de los jueces siempre sosteniendo la inocencia del acusado. Aquí nos enseñan nuestros maestros de bendita memoria que incluso un acusado puede dar testimonio para su absolución (pero como ya vimos antes uno nunca puede auto-acusarse).

Si luego de escuchar los alegatos, los jueces deliberan y unánimemente deciden absolverlo entonces así lo hacen. Si luego de las deliberaciones no hay unicidad en la decisión de absolverlo se deja el caso en "stand by" hasta el día siguiente.Hasta el otro día los jueces deben quedarse discutiendo de a parejas, tomando pausas para comer pero sin tomar vino durante todo el día. A la mañana vuelven a la corte y cada juez presenta su posición del día anterior. El que había dicho "yo lo encuentro inocente" lo dice, el juez que había dicho "yo lo encuentro culpable" también lo dice pero si alguien había dicho que lo encontraba inocente ahora no puede decir que lo encuentra culpable pero si lo puede hacer de manera inversa, o sea, si el día anterior había dicho que lo creía culpable, hoy sí puede decir que lo cree inocente. Si en este momento no hay unanimidad para declararlo inocente se prosigue a la cuenta. Si 12 jueces lo encuentran inocente y 11 culpable el acusado puede salir en libertad siendo habiendo sido absuelto. Si 12 lo encuentran culpable y 11 inocente se deben ir agregando jueces de dos en dos - para siempre mantener el número de jueces impar - hasta el número de 71 jueces. Si para este momento 36 lo consideran inocente y 35 culpable el acusado sale en libertad. Mas si en ese momento 36 lo encuentran culpable y 35 inocente, los jueces deben convencerse entre ellos para lograr que alguno de los que acusaban cambien de parecer y absuelvan al acusado. Hay una decisión enfática por parte de los sabios judíos para impedir de cualquier forma que lo que la Torá permite, las penas de muerte, se lleven acabo en la realidad. 

Hatraá. Los sabios talmúdicos sostienen que para condenar a muerte a una persona por ciertos casos, como la idolatría, se requiere que la persona haya sido advertida sobre que lo que está haciendo - o por hacer - conlleva la pena de muerte. Sólo en el caso que esa persona sepa que su transgresión es castigada con la muerte y no obstante decide continuar actuando de esa manera, la persona puede ser juzgada y sentenciada a muerte ante un Beit Din. 

viernes, 16 de marzo de 2012

Sanhedrín 39 - Ds es un ladrón, ¿Dónde está Ds?

Rabí Eliezer solía decir que debemos ser meticulosos en el estudio de la Torá para saber qué contestarle a los Apikoiros (herejes). Uno de los motivos por los cuales alguien debe adentrarse en las fuentes de su propia tradición es, según los sabios, para saber que responderle a los que atacan tu fe. Durante la edad media las discusiones teológicas y bíblicas entre cristianos y judíos eran comunes. Los cristianos atacaban defendiendo, por ejemplo, la tesis de la trinidad y los sabios judíos tenían que conocer lo suficiente de Torá para refutar aquella postura. En los tiempos del Talmud, como atestigua Rabi Iojanán, la gran discusión era en torno a la existencia de un solo Ds o varios. Los judíos, únicos en su época, afirmaban que había un solo Ds, creador del cielo y la tierra mientras que los "paganos" afirmaban que había una gran serie de deidades. Uno debía saber lo suficiente de Torá para por ejemplo si un hereje decía que había varios dioses citando la Torá donde dice (Bereshit 1:26) "hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza", oración que se encuentra en plural y que uno puede llegar a suponer que se trata de varios dioses, en realidad esto era una forma lieteraria de la Torá (lenguaje mayestático) y que le está hablando en este caso a los ángeles. Ya que unos versículos después la Torá (Bereshit 4:27) nos dice "Y Ds creó al hombre a su imagen", enunciándola en singular.

Ds es un ladrón! El emperador cierta vez le dijo a Rabán Gamliel: "tu Ds es un ladrón, ya que está escrito en la Torá que Ds hizo dormir al hombre y le arrancó un costado (algunos lo traducen como costilla) para con este crear a la mujer". La hija del emperador le dice a Rabán Gamliel que ella misma le va a refutar la teoría al padre. Ella le pide un comandante a su padre, él le pregunta para que lo quiere y ella responde que ayer por la noche robaron una pequeña jarra de plata y que la reemplazaron con una jarra de oro. Su padre le contesta que si ese es el caso "ojala que todos los días vengan a robar". Entonces su hija, con sapiencia e ingenio le dice que este es el mismo caso que Ds y la creación de Adam y Javá, ya que el Eterno no le robo a Adam su costado para nada, sino que convirtió a una pieza "inservible" en algo mucho mejor, una mujer, su Javá. Ds convirtió, en palabras de la hija del emperador, una jarra de plata en una jarra de oro. El padre a todo esto le contesta que a él no le molesta que le haya tomado el costado, lo que le molesta es que lo haya hecho a oscuras, mientras el dormía. La hija, muy astuta, le pide al padre una porción de carne para comer, ella la toma y se la pasa por la axila y luego la pone en un plato. El padre grita del horror y dice "esto es asqueroso" y su hija le contesta "así de asquerosa le hubiera parecido a Adam Java si Ds la hubiera creado y sacado de su costado mientras él estaba despierto". ¿Inteligente la hija del emperador, no?

¿Dónde esta Ds? El emperador sigue cuestionando a Rabán Gamliel. Ahora le pregunta si la Shejiná reposa sobre cada minián de judíos ¿cuantas shejinot hay? Aclaremos que la Shejiná es la noción bíblica de la Presencia Divina sobre un lugar determinado. En definitiva ¿Cómo puede ser que Ds este con cada persona, en cada lugar siendo sólo uno? ¿no deben haber entonces múltiples dioses? Con una gran retórica Rabán Gamliel le contesta si es que en tu casa ESTÁ el sol, y también está en tus patios, y en otros castillos y en tantos otros lugares ¿cómo puede ser que sea uno? Tal como el sol es uno y puede estar en cada lugar, dando calor y regocijo a diferentes personas en diferentes lugares, así también puede hacerlo Ds.

La destrucción de los malvados: En nuestra Mishná aprendemos que esta "bien" destruir a los malvados. Hay personas que es mejor que no estén a que estén. Las personas que dañan, destruyen y amenazan la existencia de muchos otros es mejor que desaparezcan del mundo pero ¿Qué hace Ds cuando un malvado es destruido? Unos dirían que se alegra, pero el Talmud nos dice muy claramente que no lo hace, no se alegra con su caída. Rabi Iojanán enseña que en el momento que los egipcios se estaban ahogando en el mar los ángeles quisieron cantar canciones de loa al Eterno porque los grandes enemigos de Israel estaban siendo vencidos. En ese momento Ds les dice: ¿la creación de mis manos se esta ahogando y ustedes quieren cantar? Ds no busca y no se alegra con la destrucción de los malvados sino más bien con la erradicación del mal. No debemos buscar terminar con las vidas de los "malvados" sino que debemos intentar terminar con el mal que hay en ellos y que hay a nuestro alrededor.

Adrán Halaj Ejad Dinei Mamonot. Volveremos a ti "Ejad Dinei Mamonot".


jueves, 15 de marzo de 2012

Sanhedrín 38 - Nivrá Adam Iejidi

Ayer vimos que los sabios insisten en que cuando un hombre se presenta a dar testimonio en un tribunal de Dinei Nefashot hay que presionarlo para que entienda la importancia de su alegato, ya que del mismo, depende, en parte, la vida o la muerte de una persona. Tambien aprendimos que Ds decide crear al hombre en soledad, crear a uno sólo y no a una multiplicidad de hombres ¿Por qué decide hacerlo de esta manera? Para enseñarnos que quien termina con una vida es como si estuviera terminando con todo un mundo y por el otro lado, para decirnos que quien salva una vida es como si estuviera salvando a todo el mundo. Ya que en última instancia, mitológicamente, todos descendemos de aquel Adam. También, dice nuestra Mishná, que fue creado un único hombre para que nadie le pueda decir a su prójimo "mi padre es más grande que el tuyo", ya que todos descendemos del mismo padre. Por otro lado esto también nos enseña la grandeza y el poder de Ds, ya que si un hombre hace un molde todas su monedas salen iguales pero Ds, en su magnanimidad, logra que del mismo molde, del mismo prototipo de hombre, salgamos hombres y mujeres disimiles con diversas cualidades y rasgos. Por último y más importante, Ds creó a un único hombre para que cada uno pueda decir "Por mí el mundo fue creado". Toda la creación no fue creada sino sólo para mí, eso según los sabios, nos debería dar la conciencia para poder trabajar durante nuestras vidas y encontrar un rumbo y un sentido durante nuestra existencia.

Hasta acá fue lo que nos enseñó la Mishná de por qué el hombre fue creado en soledad. Veamos ahora qué nos dice el Talmud:

El hombre fue creado en soledad para que los herejes no digan que hay varios dominios (o poderes) en el cielo. El hombre fue creado en soledad para enseñarle algo a los justos y a los malvados. A los justos para que no digan "yo soy hijo de un justo" por lo cual no debo esforzarme ya que su merito me traerá beneficios. Para los malvados para que no digan "soy hijo de un malvado" y ésta es mi esencia por lo cual no puedo cambiar. El hombre fue creado en soledad por los ladrones, ya que si hoy en día, que todos descendemos del mismo padre, los hombres se roban los unos a los otros, o sea se roban entre hermanos, cuanto más lo harían si desendiesemos de diversos padres!

Un poco de Midrash: El Talmud nos cuenta que el hombre fue creado en la vispera del Shabat, unos pocos minutos antes de que comience el primer Shabat de la historia. El Talmud nos da varias explicaciones de porque Ds decidió crearlo en ese momento y no en otro. La primera es para que los herejes no digan que el hombre fue un socio de Ds en la creación, o sea, para que no digan que Ds no hizo todo lo que hay en el mundo. Otro motivo para haberlo creado en el último día de la creación es para que si en algún momento al hombre se le "suben los humos", se la cree demasiado creyéndose superior a toda la creación, se le pueda decir a él que hasta un mosquito (Iatush) fue creado antes que él. Otros sabios dicen que lo creó en ese momento para que ingrese al cumplimiento de las mitzvot inmediatamente, con el cumplimiento de las normativas de Shabat. Por último otros dicen que fue para que disfrute del banquete inmediatamente. Los sabios comparan la creación del mundo y del hombre con un rey que prepara un banquete para sus invitados. Primero prepara el lugar, lo acondiciona, dispone la comida y por último hace pasar a los invitados; así hizo Ds con la creación, siendo lo ultimo en ser creado, el hombre, el invitado principal de nuestro mundo.

¿Cómo fue creado el hombre? El hombre, como todo buen lector de la Torá sabe, fue creado de la tierra. Adam, el nombre del primer hombre, también significa tierra. Rabi Meir nos enseña que Adam fue creado a partir de la recolección de la tierra de todo el mundo mientras que Rab enseña que para hacer el cuerpo de Adam se utilizó tierra de Babel, para hacer su cabeza se utilizó tierra de Israel y para todas las demás partes se utilizo tierra del resto del mundo.

¿Cómo fueron las primeras 12 horas de la creación del hombre? Rabi Iojanán nos comenta que en la primera hora, de aquel sexto día de la creación, se juntó la tierra para formar a Adam. En la segunda se la juntó en una masa sin forma. En la tercera comenzó a cobrar sentido. En la cuarta le fue insuflada el alma. En la quinta se paró sobre sus propios pies. En la sexta le dio el nombre a los animales. En la séptima Java se convirtió en su mujer. En la octava "2 ascendieron a la cama y 4 bajaron" (Adam y Java tuvieron "instantáneamente" a Kain y Hevel). En la novena Ds les prohibió que comiesen del árbol del conocimiento. En la décima pecaron. En la décimo primera fueron juzgados y en la décimo segunda fueron echados del Gan Eden (Paraíso). ¿Cómo pasa el tiempo, no? Rabí Iehudá enseña que en el momento de la creación el hombre era tan grande como todo el mundo pero cuando pecó Ds lo achicó. ¿En qué idioma hablaba Adam? Muchos pensaran que los sabios iban a decir que hablaba hebreo pero no, los sabios del Talmud dicen que hablaba el mismo idioma que ellos hablaban en sus días: arameo!!! Por último: al parecer, a los sabios no les caía muy bien la figura de Adam, no lo consideraban judío, ni padre potencial de nuestro pueblo, sino todo lo contrario. Decían que era un hereje y un descarriado ya que se burló de los decretos de Ds e incluso "estúpidamente" quiso esconderse del Eterno.

Extra: El Talmud nos comenta que en una fiesta emborrachan a ciertos sabios y que estos comienzan a decir ciertas "barbaridades", cosas que nunca hubieran dicho delante de ciertas autoridades pero que el alcohol produjo que las dijeran. Nuestros maestros entienden que detrás de nuestras "borracheras" las cosas que salen son secretos, son verdades ocultas que muchas veces en estado de sobriedad no nos animamos a expresarlas pero cuando nuestras defensas bajan salen los secretos de nuestras bocas. ¿De dónde aprenden esto? De la equivalencia numérica de dos palabras. "Nijnas Iain, Iatza Sod" (el vino ingresa y el secreto sale). La palabra Iain tiene el valor, según la guematria, de 70, mientras que la palabra Sod tiene el mismo valor. Por ese motivo los sabios dicen que cuando entra el vino a nuestros cuerpos, salen de él diversos secretos que antes estaban protegidos por ciertas inhibiciones. 

miércoles, 14 de marzo de 2012

Sanhedrín 37 - Sanhedrín y Dinei Nefashot

Disposición de los jueces ¿Cómo eran los antiguos tribunales judíos? ¿cómo era la disposición de los diversos integrantes? Nuestra Mishná nos da algunas pistas. El Sanhedrín, los 23 jueces o 71, dependiendo el caso, se sentaban en un medio circulo (como una media luna, dicen los sabios) para que todos puedan verse las caras. Acota Rashi que en un circulo entero, también todos podían verse las caras pero no todos podían ver correctamente a los testigos. Los escribas que llevaban el reporte de los juicios se ponían al costado del Sanhedrín. Adelante del medio círculo de jueces había 3 hileras de estudiantes y de otros sabios. Allí tenía que haber la misma cantidad de jueces que los que componían el Sanhedrín. Si alguno de los jueces se enfermaba, moría o tenía algún percance ellos podían reemplazarlos. El Sanhedrín funcionaba en el Beit Hamikdash, el gran Templo de Jerusalém. 

En nuestro Daf (hoja) aparece una nueva Mishná con algunos de los pasajes más famosos de todo el Talmud. La pregunta que abre esta Mishná es ¿cómo se amedrenta a los testigos? Ya dijimos que para los Dinei Mamonot se tenía que advertir a los testigos que no den falso testimonio y la importancia del valor de la verdad pero aquí, según los sabios, tenía que quedar claro que los Dinei Nefashot no eran como los Dinei Mamonot. En los últimos, si alguien da falso testimonio o se equivoca en su testimonio redime su error pagando al damnificado, en cambio en los Dinei Nefashot la vida de una persona y de toda su descendencia depende de su testimonio. Si uno se equivoca en su testimonio y por eso se condena a muerte a alguien no sólo se pierde la vida de esa persona sino de todas las generaciones que de su simiente podrían haber salido. Es por eso, según los sabios, que cuando Cain mata a su hermano Hevel la Torá dice "Demei Ajijá Tzoakim (las sangres de tu hermano gritan)". La Torá no dice "su sangre" sino "sus sangres" porque con ese asesinato Caín también asesino a toda una infinidad de seres humanos. Es por esto que dice el Talmud que el hombre fue creado en soledad para enseñarnos que quien termina con una vida termina con un mundo potencial. Mañana veremos más al respecto, ya que el Talmud profundiza en especificaciones, alegorías y mitos sobre la creación del primer ser humano.  

Arba Mitot Beit Din. Ya repetimos infinidad de veces que el Sanhedrín podía condenar a una persona a la muerte pero ¿cómo se llevaba a cabo? ¿había inyecciones letales o sillas eléctricas? La respuesta obvia es no. Las cuatro modalidades de pena de muerte que se desprenden de la Torá son: Skilá (lapidación), Sreifá (abrasamiento), Jarigá (estrangulamiento), Jének (decapitación). Nuestra Guemará, en un oscuro pasaje, nos dice que desde el momento que se destruyó el Beit Hamikdash, ergo el Sanhedrín dejo de funcionar por lo cual no se podían aplicar más estas sanciones, estas mismas penas de muerte no fueron anuladas. Dicen por ejemplo que quien se cae de un techo y muere es porque debía recibir el castigo de Skilá. Otro ejemplo: quien muere ahogado en un río es porque debía morir por Jének. Al toparnos con estos pasajes en el Talmud debemos abordarlos con sumo cuidado y con una mirada critica porque sí no podemos utilizarlo para "el mal" y así, diciendo barbaridades, desacralizar el nombre de Ds. 

Justificación del exilio: Uno de los trabajos más importantes que tuvieron que hacer los sabios de la Mishná y el Talmud era dar una respuesta teológica a los dilemas que ellos debían enfrentarse. ¿Cómo justificar las persecuciones y las muertes? ¿Cómo sostener que Ds es misericordioso cuando miles de judíos mueren a manos de los romanos? ¿Cómo justificar el exilio y la perdida de la soberanía nacional? A lo largo del Talmud ellos ensayan cientos de explicaciones. Aquí encontramos una: Según algunos sabios el exilio, Galut, hace kapará (remisión) de algunos de nuestras transgresiones, por lo cual el estado actual, que ellos tenían que vivir sin tener soberanía era una forma de reparar sus errores y los errores de sus padres. 

martes, 13 de marzo de 2012

Sanhedrín 36 - Más diferencias

Continuamos con el juego de las diferencias. En los Dinei Mamonot habíamos dicho que los jueces comenzaban a dar su veredicto desde el más grande (en conocimientos) y luego quienes estaban a su costado ¿Por qué? Porque suponemos que en casos comerciales los otros jueces no van a ser muy influenciables. En cambio, en los Dinei Nefashot, se comienza a dar el veredicto desde el costado, ya que el más grande iba al medio. Los sabios no quieren que los demás jueces en temas tan delicados como ser la vida o la muerte de una persona se vean influenciados por la posición del juez con mayor autoridad por eso ese es el último en hablar. 

Todos, según la Mishná, pueden ser jueces en los casos de Dinei Mamonot. Cuando la Mishná dice "Hakol (todos)" es para, según el Talmud, incluir a los mamzerim (bastardos) y a los geirim (conversos). Por el otro lado en los Dinei Nefashot no toda persona puede integrar la corte. Rab Iosef enseñaba que tal como el juicio tiene que salir con pureza y rectitud así también tienen que ser sus jueces. Solamente pueden integrar las cortes de Dinei Nefashot los Kohanim, los Leviim y los judíos que pueden casarse con las hijas de los sacerdotes (esto excluye por ejemplo a los mamzerim y a los geirim). Por último vale la pena mencionar que los sabios establecen que para los Dinei Nefashot sólo pueden ser jueces hombres que tengan hijos ya que si no los tienen no saben lo difícil que es criar a un hijo y por eso suelen ser más duros y severos con sus juicios. A una persona cruel tampoco se la puede apuntar como juez. 

Extra! Durante mucho tiempo, según nuestros sabios, la Torá y la grandeza política habían estado separadas. Desde Moshé hasta los tiempos de Rabí Iehuda Hanasí (siglo III, compilador de la Mishná) ningún líder judío había combinado un alto conocimiento en Torá con una alta jerarquía política. Moshé supo ser el líder político por excelencia del pueblo de Israel pero también un gran maestro de la Ley. Recién 1400 años después, en tiempos de Rabi Iehuda, un sabio pudo combinar Torá y conducción política. Luego nos dice el Talmud que desde la muerte de Rabi hasta la llegada de Rab Ashí, uno de los sabios que cerró la Guemará - junto a Ravina - no hubo ningún otro hombre en Israel que pueda combinar Torá y conducción política. Si bien afirmo que la política y la religión deben ser esferas escindidas en nuestros Estados modernos abogo porque la política no este disociada de la religiosidad. La conducción política sin un espíritu y una conciencia de lo que es moral y propio para todos los hombres puede terminar en un fanatismo tanto más o peor que una teocracia. La política no debe aliarse a una religión sino a lo que esta detrás de todas las religiones, la búsqueda de Ds y de la felicidad. La búsqueda de una vida más elevada, más moral y en paz con uno mismo y con sus vecinos. 

lunes, 12 de marzo de 2012

Sanhedrín 35 - Lo Doje Shabat

¿Cuándo se pueden llevar a cabo los juicios? ¿tanto de día como de noche? ¿todos los días de la semana? De este tema se ocupa mayormente nuestra Guemará de hoy. La Mishná nos había comentado que los Dinei Mamonot se pueden llevar a cabo tanto de día como de noche. El Talmud dice que esto se aprende de un versículo de Shemot (18:22) en el cual se nos dice que "juzgaron al pueblo en todo momento", esto significa que este tipo de juicios se puede llevar a cabo en cualquier momento del día, tanto con luz como con oscuridad. Los sabios aclaran, sin embargo, que estos juicios pueden concluirse a la noche, mas no comenzar. 

Los Dinei Nefashot pueden ser juzgados únicamente durante el día y deben terminar o bien el mismo día, si se lo declara inocente o bien al otro día (pero no a la noche en ninguno de los dos casos) si se lo declara culpable. Esto es aprendido por los sabios del Talmud de otro versículo que enfatiza y relaciona la cuestión de la justicia con el sol (shemesh). Por este motivo los Dinei Nefashot no pueden llevarse a cabo en las vísperas de Shabat o de Iom Tov ya que existe la posibilidad de que si se condena a muerte a un acusado haya que esperar hasta el otro día porque de no hacerlo se estaría violando al Shabat o al Iom Tov. Hay cuestiones que desplazan al Shabat y otras que no. La Mitzvá Mitat Beit Din (las penas capitales emitidas por los tribunales) no desplazan al shabat y por este motivo no pueden llevarse acabo ese día. Algunas cuestiones como el Brit Milá sí desplazan (dojim) el Shabat y para su realización se pueden efectuar todas las tareas prohibidas de Shabat. Otra cuestión que desplaza el shabat es la posibilidad de salvar una vida, para ser esto se puede prender fuego, viajar, cortar, pagar, etc. En nuestra Guemará Reish Lakish enseña que la Avodá, el trabajo cultico, del Beit Hamikdash desplaza al Shabat. Para ofrecer los sacrificios se necesita prender fuego, matar a los animales, cortar, trasladar fuego, etc., y todo esto "desacraliza" al Shabat pero para el servicio del Templo se pueden realizar todas estas labores generalmente prohibidas. 

Extra! Rabi Itzjak enseña que todo día en el cual se ayune si se da la tzedaka a los más necesitados recién a la noche es como si estuviéramos derramando sangre. ¿Por qué? Porque los hambrientos no pueden esperar para comer. Si nosotros retenemos por más tiempo del necesario comida que debe ser destinada a ellos los estamos "matando" con la espera. Otro punto a tener en cuenta y que hace cerrar esta historia es que en los tiempos talmúdicos se acostumbraba a dar en tzedaka el equivalente a lo que no se gastaba en alimentos en los días de ayuno. Sin duda una practica que debe revitalizarse. 

domingo, 11 de marzo de 2012

Sanhedrín 34 - Lizjut o Lejová

Ya fue establecido que en los juicios de Dinei Mamonot TODOS pueden argumentar en favor o en contra del acusado. Esto incluye a los alumnos que estaban sentados atrás del tribunal por si era necesario que reemplazacen a algún juez. Ahora bien ¿los testigos también pueden argumentar para condenar a alguien o para absolver? o simplemente ¿los testigos se tienen que limitar a dar su testimonio sobre lo que vieron? La discusión  se da en torno al siguiente versículo (Bemidbar 35:30)  "...mas un solo testigo no hará fe contra una persona para que muera". Lo que discuten los sabios en nuestra Guemará es si un testigo puede argumentar en un juicio ya que aparentemente este versículo de la Torá nos dice que un testigo no puede hacerlo porque puede provocar que con su argumento una persona sea condenada a morir. Rabi Iosi de manera inteligente dice, si es Lizjut, para absolver, puede decir lo que quiera ya que no le producirá la muerte pero si es Lejová, para condenarlo, no puede porque quizás con su argumento se lo condene a una pena capital. Esto es en el caso de Dinei Nefashot pero en el caso de Dinei Mamonot TODOS, incluyendo a los testigos, pueden argumentar lizjut o lejová

Procedimientos judiciales: Luego que se presenten las pruebas llega el momento en que los sabios discuten sobre el asunto y cada uno presentan su posición y su taam (argumento) para condenar o para absolver al acusado. Mientras que los Daianim (jueces) discuten, dos sofrim (escribas) se ponen delante de ellos y escriben los argumentos a favor y en contra que van apareciendo. Esto sirve para que si alguno de los jueces se olvida su argumento puedan recordárselo. Los jueces pueden utilizar, principalmente, tres fuentes para su argumentación: la Mikrá (una cita bíblica), la Mishná (alguna ley de aquel código legal), o la sbará (la lógica y la deducción). Si dos jueces tienen el mismo argumento (taam) los escribas deben escribir una sola fuente de la mikrá, para sostener su argumento ya que se nos enseña después que: "Un solo versículo puede convertirse en varios argumentos (puede ser usado en diferentes maneras e interpretado de múltiples formas y en distintas ocasiones) sin embargo un solo taam (argumento) no puede salir de diversos versículos." 

"Como un martillo que rompe la piedra" (Irmiahu 23:29). De lo argumentado anteriormente el Talmud nos enseña que tal como un martillo rompe y quebranta la piedra en miles de destellos así son los versículos bíblicos que se desprenden en miles de argumentos y sentidos (taamim). Cada uno de los versículos de la Torá pueden interpretarse de miles de maneras diferentes y usarse en diversas argumentaciones encontrando en cada momento un nuevo sentido. En cada generación y en cada situación que nos toca vivir los versículo de nuestra Torá nos envían nuevos mensajes que debemos saber interpretar y utilizar para acercarnos más al servicio de Ds. 

viernes, 9 de marzo de 2012

Sanhedrín 33 - Majzirim o ein majzirim?

¿Volvemos o no volvemos? Esa es la cuestión. En el día de ayer, teniendo presente nuestra Mishná, habíamos dicho que una de las diferencias entre los Dinei Nefashot y los Dinei Mamonot es que los primeros una vez que finalizó el juicio sólo se puede "volver", si se encuentran nuevas pruebas o testigos y revertir la sentencia únicamente para absolver; mientras que en los últimos se puede revertir la sentencia tanto para absolver como para condenar. A lo que se va a abocar nuestra Guemará, en el día de hoy, es a discutir en qué casos se puede y en cuáles no se puede revertir una sentencia. Comencemos por decir que revertir la sentencia es una excepción. Partimos de la base de que los jueces deliberan en base a las pruebas que tienen y así dictaminan. Pero a veces pueden fallar.

Mishná o Shikul Hadaat: ¿En qué casos se puede revertir la sentencia en los Dinei Mamonot (tanto para absolver como para condenar)? En los casos que el error haya provenido de una mala lectura de la Mishná o un olvido de la misma. Si el error de los jueces se produjo porque leyeron mal una Mishná (una ley explicita y claramente detallada) o si se olvidaron alguna de sus leyes, deben volver y revertir su dictamen ya que su error fue evidente y burdo. Si el error fue de Shikul Hadaat, una mala interpretación o una deducción errónea, de algo que no estaba especificado en la Mishná el dictamen no tiene retorno y no se puede revertir. 

En el caso de los Dinei Nefashot, nuestra Mishná había dicho que solamente pueden revertirse los casos en que alguien había sido condenado y ahora los jueces buscan exonerarlo. La pregunta del Talmud es ¿de dónde aprendemos esto? y en consecuencia ¿de dónde aprendemos que si una persona fue absuelta no se la puede volver a condenar? Su respuesta es de Shemot 23:7 "VeNaki veTzadik al Taarog - el limpio y el justo no morirán". Para la primer pregunta toman la primera palabra del versículo; al "Naki", que es el íntegro, el limpio, el que no cometió pecado no se lo debe matar. Entonces si se cometió un error cuando fue juzgado la primera vez, los jueces tienen la potestad por este mandato bíblico de invertir el dictamen. A la segunda pregunta la contestan con la segunda palabra "Tzadik", el justo, o por lo menos el que fue encontrado justo-inocente en el primer juicio, tampoco debe ser muerto (aunque ahora se compruebe que ya no es tan Tzadik como parecía). 

Una aclaración importante. El Talmud nos dice, con respecto a la Mishná, que cuando ésta habla sobre los jueces que no pueden "volver para condenar" es sólo en los casos que los Tzdukim no acuerdan con los rabinos. Si en una cuestión que los Tzdukim acuerdan con los sabios rabínicos, los jueces pueden invertir el dictamen y condenar a quien habían absuelto. ¿Cómo se explica esto? Los Tzdukim formaban parte del pueblo de Israel pero ellos solo recibieron, o mejor dicho aceptaron, la Ley escrita (la Torá) y no la ley oral (la Mishná y el Talmud) por lo cual si hay un hecho muy evidente que la Torá condena como por ejemplo encender fuego en Shabat y los sabios absolvieron a alguien que lo hizo, los jueces deben volver el juicio atrás y declarar culpable a la persona ya que su error fue, como vimos antes, muy burdo. Fueron contra directamente de lo que dice la Torá. En cambio si en lo que se equivocaron los sabios es en una ley de los sabios de la Mishná o del Talmud, como por ejemplo, tocar instrumentos musicales en Shabat, los jueces no tienen que ir atrás con el juicio y condenar al que fue absuelto ya que su error es "menos evidente" y de "menor grado". 

jueves, 8 de marzo de 2012

Sanhedrín 32 - Mamonot y Nefashot

El cuarto capítulo del tratado de Sanhedrín abre con una introducción a las similitudes y las diferencias entre los Dinei Mamonot (juicios relacionados con la propiedad) y los Dinei Nefashot (juicios con posible pena capital). En primer término se nos dice que tienen una sola similitud, ambos necesitan de Drisha vJakira (investigación exhaustiva) en relación a los testigos. Tanto para unos juicios como para los otros se necesita que se revisen a fondo las declaraciones de los testigos para determinar si su testimonio es válido o no. Esta ley sigue los lineamientos de la Torá ya que allí se nos dice "Mishpat Ejad Iehe Lajem - un solo juicio será para ustedes", los sabios entienden este versículo en el sentido de que no debe haber diferencia entre los procedimientos judiciales de los Dinei Mamonot y los Dinei Nefashot. No obstante esto, los sabios del Talmud establecieron por decreto que para los juicios civiles y correspondientes a la propiedad (dinei mamonot) no sea necesaria la revisión exhaustiva de los testigos porque esto llevaría a "cerrar las puertas a los préstamos". Los sabios entienden que si uno se va a poner muy meticuloso con cada testigo, con cada declaración en torno a los prestamos por ejemplo, la gente no daría testimonio o sería muy difícil encontrar un testimonio 100% adecuado. Esto generaría que la gente, según su lógica, deje de prestar dinero, lo que le haría más dificultad la vida a los más necesitados. Dicho sea de paso, como estudiamos en el tratado de Guitin, este fue el motivo por el cual los sabios "anularon" el año de la Shmitá y su correspondiente remisión de las deudas, ya que si esto fuera así nadie prestaría dinero. 

Ahora sí, llega el momento de enumerar las diferencias entre los juicios comerciales (dinei mamonot=DM) donde uno puede ganar o perder dinero y los juicios penales (dinei nefashot=DN) donde uno de los acusados, si se lo encuentra culpable, puede perder la vida. Como veremos hoy y con el correr de los días hay una decisión de los sabios por hacer casi imposible que un acusado sea condenado a muerte. Nuestros maestros siempre quieren, comprendiendo que la Torá da lugar a las penas de muerte, tratar de limitar su aplicación. He aquí algunos ejemplos:

1) Los DM se juzgan con tres jueces y los DN con 23. 
2) Los DM pueden ser abiertos tanto con la presunción de inocencia o de culpabilidad pero los DN siempre deben ser abiertos con la presunción de inocencia. Los jueces en concordancia deben empezar los DN diciendo "si no hiciste nada de lo que te acusan, entonces no temas". 
3) En los DM si un juez en primer lugar decidió condenar o absolver a alguien luego puede volver y "cambiar" su posición. En los DN sólo puede cambiar si primero decidió condenar y luego decide absolver pero no al revés. 
4) En los DM todo el mundo puede aportar pruebas y dar su opinión tanto para acusar como para absolver, incluso los sabios que están sentados en la sala. En los DN solamente pueden dar su opinión si es para absolver pero no para acusar.  
5) Los DM se discuten durante el día y se finalizan a la noche. Los DN se discuten y se terminan en el día. Los DM se terminan en el mismo día tanto para condenar como para absolver. Los DN empiezan y terminan en el mismo día para absolver pero para condenar se terminan al otro día (para esperar que algún juez cambie de opinión o aparezcan nuevas pruebas). 
6) La sentencia de los DM comienza a ser dicha por el más grande de los jueces mientras que en los DN por el más pequeño (para que este no sea influenciado con la declaración del más grande). 
7) Todos pueden ser jueces en DM pero en DN solamente califican: los kohanim, los leviim y los judíos que estén en condiciones de casarse con una hija de un kohen (esto excluye por ejemplo a los bastardos).

Tzedek, Tzedek Tirdof. Esta frase tan famosa que significa "Justicia, justicia perseguirás" es discutida en nuestra Guemará. La doble alusión a la idea de "justicia (tzedek)" le da a nuestros sabios la posibilidad de argumentar que siempre que se tenga la mínima sospecha de que un juicio puede estar siendo adulterado o que un testigo puede estar dando falso testimonio, se debe pasar a revisar y a examinar a los testigos. Incluso en los casos de DM que como dijimos los sabios decretaron que la investigación de los testigos no es necesaria. Otras opiniones referentes a este versículo aparecen en nuestra Guemará. Nuestros sabios nos dicen que en cada generación debemos ir en busca del Beit Din más afamado. Debemos perseguir a la justicia y debemos así, buscar a los mejores jueces para que sean ellos los que juzguen nuestros casos. 

Jag Purim Sameaj!

miércoles, 7 de marzo de 2012

Sanhedrín 31 - Pruebas y testigos

Una vez que los jueces dan un dictamen ¿el juicio se cierra de una vez para siempre o hay posibilidad de anular o invertir la sentencia? En torno a este tema discute nuestra Guemará el día de hoy.

En la Mishná aparece que todo el tiempo que alguien tenga y traiga ante el juzgado una Reaiá (prueba) la sentencia puede ser anulada o revertida. Si los jueces le dan tiempo a los litigantes de 30 días una vez finalizado el juicio, para traer otras pruebas, si estos lo hacen y trayendo las pruebas son consideradas válidas y se pueden utilizar para revertir la sentencia; en cambio si lo hacen después de 30 días la sentencia queda firme. Por el contrario, como afirma Rabán Shimón ben Gamliel si durante el juicio les es preguntado a los litigantes si tienen alguna otra reaiá (prueba) o si tienen otros eidim (testigos) y estos contestan que no, si después de un tiempo traer tanto reaiot (plural de reaiá) como algún nuevo ed (singular de testigo) no se los toma como válidos para el juicio. Si uno no sabía que contaba con otras reaiot u otros eidim y luego de un tiempo aparecen tampoco se los puede utilizar porque se sospecha, como en el punto anterior, que son pruebas adulteradas o bien testigos falsos.

Hoy fue corto y conciso, pero así terminamos el tercer capitulo del tratado de Sanedrín.

Jag Purim Sameaj!

Hadran Alaj Ze Borer! Volveremos a tí "Ze Borer"!

martes, 6 de marzo de 2012

Sanhedrín 30 - zakai/jaiab

Estudiemos un caso práctico e interesante que nos presenta la Guemará. Dijimos que si dos de los jueces consideran que una persona está zakai ("inocente") y una considera que está jaiab ("culpable") la persona queda exonerada de pagar su supuesta deuda. Ahora bien, al parecer en la antiguedad, como imagino que pasa en nuestros días, se guardaba un registro de los juicios. Siendo esto así ¿Cómo se debía escribir la sentencia? Tres opciones nos da el Talmud. Reish Lakish sugiere que se debe escribir: Ploni (fulano) y Ploni lo declararon inocente, mientras que Almoni (mengano) no declaró culpable. Rabi Iojanán nos dice directamente que se debe escribir en el expediente del juicio "zakai", inocente ergo no obligado a pagar su supuesta deuda. Rabi Eliezer nos dice que se debe escribir "Por sus palabras Ploni fue declarado inocente", Rashí explica que con esta declaración no se dan los nombres de los jueces que votaron por una cosa o por la otra pero se da la idea de que la decisión no fue unánime. Finalmente la Guemará dirá que se debe seguir esta última posición en la cual se aclara que la decisión de absolución no fue unánime pero tampoco se dan los nombres de los jueces que lo declararon culpable. El Talmud, discutiendo el motivo por el cual esto es así nos dice que quizás pueda tener que ver con el mandato bíblico de no ir "detrás de las habladurías" y de no calumniar. Si se escribe quiénes fueron los jueces que condenaron, con nombre y apellido, la gente del pueblo puede empezar a hacer habladurías de los mismos. 

Mai Beineiu? Así pregunta la Guemará. Más allá de estos detalles técnicos y literarios ¿Qué diferencia hace como se "escriba" la sentencia si el resultado es el mismo? El Talmud responde que la diferencia está en el hecho de quién debe pagar si el Beit Din se equivoca en su dictamen. Si luego de un tiempo sale a la luz que los jueces se equivocaron en su decisión ¿Quién debe pagar por su equivocación? La Halajá queda que si un tribunal declaró culpable a alguien que en realidad era inocente y por este motivo esta persona debió pagar una deuda que nunca contuvo los jueces deben, en cierta medida, hacerse responsables. Si tres jueces lo declararon unánimemente culpable cada uno debe pagar de su bolsillo un tercio de la deuda que este hombre por error de ellos tuvo que pagar. Si dos fueron los jueces que lo encontraron culpable estos pagan dos tercios y el hombre debe hacerse responsable del otro tercio. ¿Cuánto más serios serían nuestros sistemas judiciales si los mismos jueces tuvieran que pagar de sus propios sueldos cuando se equivocan en un dictamen? 

Shneiem Keejad. Hay una larga discusión en la Guemará en torno a las declaraciones de los testigos. Las mismas para ser válidas deben, como criterio general, ser como "una sola". Deben expresar lo mismo pero, como veremos, no deben decir necesariamente lo mismo. Puede haber algunas diferencias en las declaraciones, que si no son sustanciales, sus testimonios siguen siendo válidos.

Unos ejemplos: Si un testigo dijo que una persona le debe a la otra "Mané Shajor" (plata vieja, suponemos que es plata gastada y de cierta antigüedad) y el otro testigo dice que en realidad le debe "Mané Lavan" (plata nueva, de reciente emisión) sus declaraciones son validad y el que es encontrado culpable puede pagar 100 (mané) tanto con billetes nuevos como viejos.
                     Un caso más interesante es el caso del monto de la deuda. Si un testigo dice que Ploni le debe a Almoni 100 y otro 200 ¿Qué se hace? uno supondría que las declaraciones se anulan porque no coinciden en el monto pero la Guemará nos dice que el deudor debe pagar 100 ya que este se encuentra dentro de los 200.
                      Un último caso: Si un testigo dice que Ploni le debe a Almoni un jarrón de vino y otro dice que le debe un jarrón de aceite sus testimonios no son válidos ya que están hablando de dos materiales y sustancias diferentes, y que además, su valor comercial es dispar. 

lunes, 5 de marzo de 2012

Sanhedrín 29 - Bedikat Haedim

Luego de haber definido quiénes eran los hombres que estaban inhabilitados para ser jueces o actuar como testigos la Mishná, y posteriormente, la Guemará, discutirán cómo se hace para evaluar a un testigo. La pregunta, en palabras de la Mishná es: ¿Cómo se revisa a los testigos? Lo que intentan enseñarnos los sabios es el procedimiento por el cual debemos evaluar la veracidad de las declaraciones de los testigos ¿cómo sabemos que están diciendo la verdad? 

Quien alguna vez fue janij jugó alguna vez al juego "el crimen perfecto". Para quien no lo conoce lo explico sucintamente. De un grupo de X cantidad de personas 2 de ellos salen y tienen 5 minutos para planificar un crimen. Tienen que ponerse de acuerdo en una serie de cuestiones amplias tales como fechas, números, colores, hechos, etc. Luego se llama a uno de ellos y, sin que el otro escuche, se le hacen una batería de preguntas como por ejemplo ¿dónde ocurrió el asesinato? Este debe responder a cada una de las preguntas que el "tribunal" le haga. Luego entra el otro de los jugadores y el que estaba respondiendo se retira. A este se le hacen las mismas preguntas que al primero, si este responde de la misma manera que el primero entonces ambos han ganado pero si responde de manera diferente a alguna de las preguntas entonces ambos han perdido. De manera similar se evalúa, según la halajá, a los testigos. 

¿Cómo es el procedimiento? Se hace ingresar a los dos testigos a una sala y en ella se los amedrenta. El Talmud se pregunta ¿cómo se los amedrenta? Se les leen varios versículos de la Torá y de los profetas donde se enfatiza el valor de la verdad y las consecuencias negativas que la mentira trae. Los jueces los persuaden para que lo único que salga de sus bocas sea la verdad. Luego se echa a todos del cuarto y se queda el tribunal con el testigo más adulto. Y la Mishná pone un ejemplo práctico para explicarnos cómo se evalúa la credibilidad de un testigo. El ejemplo es el caso de una persona que le prestó dinero a la otra y dice que ya se la devolvió o bien que nunca le fue prestado. Al testigo le preguntan ¿Cómo sabe usted que éste le debe plata a éste? Si el testigo contesta que escucho de la boca de alguien que ploni (fulano) le debía a almoni (mengano) entonces su testimonio no es válido porque no es de primera fuente. Pero si  el testigo dice "delante nuestro ploni le dijo a almoni que le debía 200 zuz (los dólares de la epoca)" entonces su testimonio es considerado, en primer término como válido. El Talmud luego va a decir que los testigos de un acuerdo de palabra en relación a un préstamo de dinero no tienen la cualidad de testigos hasta que el que presta el dinero les diga "Atem Edai" (ustedes son mis testigos). Curiosamente este es el lema del Seminario Rabínico Latinoamericano, donde tengo el placer y el honor de estudiar. Esta frase se extrae del profeta Isaías y nos habla a todos como testigos de Ds. 

Luego de esta primera inspección, se hace ingresar al segundo de los testigos. Si coinciden las declaraciones de ambos testigos los jueces pueden comenzar a deliberar (Nosein veNotnim) sobre el asunto en cuestión. Si dos jueces dicen que la persona esta exenta (zakai) y uno dice que esta obligado (jaiab) a devolver el dinero entonces la persona está zakai y se lo absuelve. Si dos jueces dicen que esta jaiab y uno dice que esta zakai entonces la persona esta jaiab y debe devolver el dinero. Si dos jueces dicen que esta zakai o dos jueces dicen que esta jaiab y el restante dice "Eini Iodea - yo no lo sé" entonces hay que traer más jueces para que deliberen. Cuando terminan de debatir se invita a que ingresen los litigantes y el más grande, entre los jueces, da el dictamen.  

jueves, 1 de marzo de 2012

Sanhedrín 28 - K´robim

Ya establecimos que los trasgresores de los preceptos con premeditación, los apostadores, los usureros, los que comercian el séptimo año y de los que se sospecha que dan falso testimonio están inhabilitados para ser testigos. Pero ¿Qué pasa con los familiares? ¿Qué pasa con todas las personas que pueden ser perfectamente respetables, justas y observantes pero tienen algún lazo de relación con alguno de los litigantes? El Talmud comprende que esta relación de parentesco puede nublar su juicio y sus declaraciones por lo cual los invalida para dar juicio. Algunos de los familiares inhabilitados para dar testimonio o para ser juez son: padre, hermano, tío materno, tío paterno, suegro, yerno, etc. Como verán todos los inhabilitados son hombres, esto no quiere decir que las mujeres podían actuar como testigos, sino todo lo contrario. El Talmud, imbuido del mundo heleno y romano, en el cual las mujeres no podían ser testigos (porque no tenían testículos, los pequeños testimonios, y en la antigüedad el hombre juraba sobre ellos) decreta que las mujeres no pueden dar testimonio excepto en casos muy puntuales como algunas cosas de divorcios (como ya vimos en el tratado de Guitin). El tema de la mujer actuando como testigo es un caso que se sigue discutiendo hasta nuestros días principalmente en el movimiento conservador donde hay mucho debate de nuestros rabinos en torno al tema. La Mishná despierta otro problema: Según una fuente anónima si la relación de parentesco se termina (por divorcio o muerte) la persona ya no se considera Karob (cercana) y puede dar testimonio pero Rabi Iehuda dice que aunque la relación se haya terminado esta persona no puede dar testimonio. 

¿De dónde aprenden los sabios que los familiares cercanos no pueden dar testimonio o actuar como jueces? La respuesta a esta pregunta es obvia: de la Torá! No obstante la manera en la cual "descubren" esto es más que interesante. En Devarim 24:16 se nos dice "No morirán los padres por los hijos ni los hijos por los padres", esta afirmación está en el contexto de los pecados, cada quién es responsable de sus pecados según esta fuente. Lo que despierta la atención de los sabios es que esta cita continúa diciendo "cada uno por su pecado morirá", esto para los sabios es una redundancia. Si ya dijimos que los padres no deben morir por los pecados de los hijos y viceversa ¿para qué necesito esta segunda parte? Ellos mismos responden que es para enseñarnos que "no morirán los padres por los hijos" con el testimonio de los hijos y "no morirán los hijos por los padres" con el testimonio de los padres. Los sabios infieren que este versículo nos viene a enseñar que los padres no pueden testificar en un caso donde sus hijos estén comprometidos y viceversa porque con su testimonio, si es un caso de dinei nefashot, pueden incluso "matarlos", ya que pueden comprometerlos con una causa donde su castigo sea la pena de muerte. De esta inferencia (Padres-hijos) los sabios extienden esta norma a muchas otras relaciones de parentesco como ser tíos, cuñados, suegros, hermanos del yerno, etc.

Oheb veSoné: El que ama y el que odia: En la Mishná también se nos dice que si una persona ama a otra o si una persona odia a otra, más allá de que no tenga relación de parentesco, tampoco puede actuar como testigo o como juez. Por otro lado la Mishná nos dice que no sospechamos que los judíos puedan torcer el juicio por estas relaciones afectivas por lo cual se permitiría su testimonio sin embargo el Talmud y los halajistas posteriores van a enfatizar que si se sabe públicamente el amor o el odio de parte de alguien para con alguno de los litigantes, esta persona no puede presentarse ni como juez ni como testigo. ¿Cómo sabemos si una persona odia o ama a alguien? El Talmud no puede dejar esta pregunta abierta por lo cual trata de dar un parámetro. En relación al amor habla sobre el amigo que ayuda al novio en todos los preparativos del casamiento y en los días que le siguen. En cuanto al odio, dicen los sabios, que se considera que una persona odia a la otra cuando por tres días no le puede hablar "en paz".