lunes, 5 de septiembre de 2011

Guitin 44

Recapitulemos. Si uno vende a un esclavo a un no-judío o fuera de la tierra de Israel el esclavo queda en libertad. Así es nuestra Mishná. ¿Cuál sería el problema? Si ya hemos visto que hay una intención dentro de la halajá de facilitar lo más posible la libertad, o los procesos de liberación de los esclavos. Y digo más: si uno vende un esclavo en alguna de estas situaciones los jajamim tienen el poder de multar al dueño por haberlo vendido. ¿Por qué tanto problema? Nuestros maestros explican que si uno libera a un esclavo, como pasaría en estos casos, el mismo se hace completamente judío. Antes, durante la esclavitud, era un "medio-judío", tenía que cumplir las mitzvot negativas (no matar, no comer cerdo, no trabajar en shabat) pero no así las mitzvot positivas (hacer tefila, ponerse tefilin, estudiar Tora), pero ahora sería un judío al 100% con todas las obligaciones que ello implica. Y nuestros maestros, bien suponen, que este "nuevo judío" bajo dominio Goi no se le va a permitir que descanse en Shabat o que pueda cumplir el resto de las Mitzvot, por lo cual insisten e instituyen ésta halajá para que los amos judíos no vendan a sus esclavos y no los comprometan a una difícil situación. Porque, lo que estarían haciendo es poniéndole obstáculos a un judío en el cumplimiento de sus preceptos. OK, ya resolvimos este primer punto ¿Pero qué tiene que ver el 'fuera de la tierra de Israel'? ¿Por qué, como amo, si se lo vendo a un judío fuera de Israel también soy penado y multado? Porque estás haciendo que un judío cumpla menos Mitzvot, ya que hay muchas mitzvot que sólo se cumplen en la tierra de Israel. Estás impidiendo que un judío aumente el número de mandamientos en su vida, es más, estás haciendo que disminuyan. En un famoso pasaje del tratado de Ketubot, en el último capítulo, se dice que a un judío le está permitido moverse e irse a vivir a la Tierra de Israel, pero no salir de ella. ¿Por qué? Porque hay que aumentar en mitzvot y no disminuir. Maalim vekedusha velomoridim, aumentamos en santidad pero no descendemos. 

Una vez entendido este concepto me permito compartir con ustedes algunos datos interesantes de esta Guemará. La misma se pregunta qué pasa si lo vendo por un plazo de 30 días, yo se que va a volver, o si lo vendo con la condición de que le permitan descansar en Shabbat o en las fiestas (aunque parezca gracioso verdaderamente la Guemará lo trae como posibilidad) ¿Qué pasa? La halajá queda que hay una duda en su liberación, no se sabe bien su estado. 

En algo la Mishná es clara: a un goi no se lo podemos vender. ¿Qué pasa con un Ger Toshav? Este es un no judío que decidió no cometer idolatría, o sea, es un punto intermedio. ¿Qué pasa con un Israel Meshumad? Un judío apóstata. Con el primero de los casos la Guemará contesta que es como un Goi, por lo cual estaría prohibido también venderlo a un Ger Toshav. Y con respecto al apóstata lo pone en la misma categoría que los Cuti (samaritanos) y dice que hay quienes los tratan como no-judíos y otros como judíos. 

Ya que fue usado muchas veces y es frecuente en nuestro lenguaje judío me quiero referir unas líneas a la palabra "Goi". Muchos judíos la usan de forma despectiva, lo cual es simplemente una aberración y equivocación de parte de ellos. Goi es una categoría halájica. Es una categoría de ley judía. Goi significa nación. Cuando yo me refiero y utilizo la palabra Goi no la cargo con intenciones peyorativas ni de forma despectiva, es usada simplemente en términos legales. Hay diferencias entre Goi y judíos, sí las hay. La diferencia está en el cumplimento de las mitzvot, ninguno es mejor ni peor. Un judío "tradicionalmente" debe cumplir 613 mitzvot y un Goi 7, esa es toda la diferencia.  

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