"Lo torcido no se puede enderezar, y con lo incompleto no puede contarse" afirmaba aquel oscuro escritor de Kohelet-Eclesiastes (1:15). La Mishná no suele citar versículos bíblicos aunque en varias oportunidades, como es en nuestra Guemará del día, encontramos algunos de ellos. En una nueva Mishná nos encontramos con estas palabras atribuidas en la tradición judía al rey Salomon. El contexto es lo que los sabios llaman Tashlumim (compensaciones). Si uno, por ejemplo, no ofreció el sacrificio festivo el primer día de la festividad (cuando correspondía ofrecerlo) puede sin embargo en forma de Tashlumim ofrecer los sacrificios correspondientes durante todos los días subsiguientes dentro de la festividad. Ahora en el caso de que se hayan terminado los días festivos y esta persona no haya ofrecido los sacrificios no tiene ya la posibilidad de "reparar" su error con un sacrificio complementario. En este contexto cita la Mishná "Lo torcido no se puede enderezar". Hay errores que son posibles de reparar, hay otros que no.
El Talmud discutirá más en profundidad cuales son otros ejemplos del principio de Kohelet sobre "Lo torcido no se puede enderezar" (Meuvat Lo Iujal Litkon). Por ejemplo si uno se acuesta con una mujer que estaba prohibida para él y tienen un hijo, aquel hijo será un mamzer (bastardo) y no hay forma de reparar aquel error por lo cual se aplica el concepto de que aquello que esta torcido no se puede enderezar. Frente a esta perspectiva hay otros errores como robar que pueden ser facilmente reparados al devolver lo robado y agregar un extra por los daños causados.
El Talmud continúa dando algunos ejemplos de Meuvat Lo Iujal Litkon diciendo que por ejemplo quien no lee el Shemá de la mañana, o de la noche, o quien no recita la plegaria de la mañana o de la noche, no puede reparar aquel error ya que "pasó" el tiempo predeterminado para aquella oración (sin embargo tal como puede haber Tashlumim de los Korbanot en algunos casos los rabinos permitirán si uno se olvidó de recitar cierta plegaria de repetir la Amidá en la siguiente oración). Según Rabi Shimon ben Iojai aquello que esta torcido no hace referencia a algo que intrinsecamente esta mal sino a algo que originalmente estaba derecho y luego fue torcido. Él da el ejemplo de un Talmid Jajam (de un sabio) que se aleja de la Torá. Un sabio, anteriormente "hecho y derecho", se lo llama torcido cuando se aleja de la Torá y para está persona no hay reparación. Rabí Iehuda Ben Lakish agrega al respecto que aquel estudiante de Torá que se aleja y abandona sus estudios y la observancia de sus preceptos es: "Cual ave errante lejos de su nidoes el hombre errante lejos de su hogar." (Proverbios 27:8). El hogar del pueblo judío se encuentra en la Torá, abandonar la Torá es abandonar el hogar.
El Talmud discutirá más en profundidad cuales son otros ejemplos del principio de Kohelet sobre "Lo torcido no se puede enderezar" (Meuvat Lo Iujal Litkon). Por ejemplo si uno se acuesta con una mujer que estaba prohibida para él y tienen un hijo, aquel hijo será un mamzer (bastardo) y no hay forma de reparar aquel error por lo cual se aplica el concepto de que aquello que esta torcido no se puede enderezar. Frente a esta perspectiva hay otros errores como robar que pueden ser facilmente reparados al devolver lo robado y agregar un extra por los daños causados.
El Talmud continúa dando algunos ejemplos de Meuvat Lo Iujal Litkon diciendo que por ejemplo quien no lee el Shemá de la mañana, o de la noche, o quien no recita la plegaria de la mañana o de la noche, no puede reparar aquel error ya que "pasó" el tiempo predeterminado para aquella oración (sin embargo tal como puede haber Tashlumim de los Korbanot en algunos casos los rabinos permitirán si uno se olvidó de recitar cierta plegaria de repetir la Amidá en la siguiente oración). Según Rabi Shimon ben Iojai aquello que esta torcido no hace referencia a algo que intrinsecamente esta mal sino a algo que originalmente estaba derecho y luego fue torcido. Él da el ejemplo de un Talmid Jajam (de un sabio) que se aleja de la Torá. Un sabio, anteriormente "hecho y derecho", se lo llama torcido cuando se aleja de la Torá y para está persona no hay reparación. Rabí Iehuda Ben Lakish agrega al respecto que aquel estudiante de Torá que se aleja y abandona sus estudios y la observancia de sus preceptos es: "Cual ave errante lejos de su nidoes el hombre errante lejos de su hogar." (Proverbios 27:8). El hogar del pueblo judío se encuentra en la Torá, abandonar la Torá es abandonar el hogar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario