jueves, 8 de junio de 2017

Ketuvot 67 - "Sacarlo de la pobreza y devolverlo a su riqueza"

En una nueva Mishná se nos enseña la cantidad mínima que un padre debe dar como Nedunia (el dinero que la mujer trae al matrimonio) los sabios nos dicen que en el caso de una muchacha huerfana también se debe dar esa cantidad mínima (50 zuz) pero la misma debe ser tomada de la caja de Tzedaká. En este contexto el Talmud desarolla una larga e interesante Sugya sobre la pobreza y la responsabilidad colectiva para ayudar a los necesitados. 

Según nuestros maestros debemos ayudar a los necesitados pero más que eso, debemos reestablecerlos al estatus social y económico que tenían antes de caer en desgracia. Así interpretan el siguiente versículo: " sino abrirás a él tu mano liberalmente, y en efecto le prestarás lo que necesite." (Deut. 15:8). Dicen que "Dei Majsoro" significa que uno tiene la obligación de alimentarlo y mantenerlo en su situación de pobreza y que la segunda parte "asher ijaser lo" significa que uno tiene que darle "todo lo que le falte", incluso, dice el Talmud "un caballo y un esclavo". En definitiva los sabios nos enseñan que cuando alguien cae en la pobreza no solo hay que proveerle el alimento mínimo necesario para que subsista sino en la medida de lo posible ayudarlo a no perder su estatus social. Si solía tener un caballo y un esclavo entonces se debe intentar proveerle uno también. El Talmud, para ejemplificar aún más este principio, nos dice que cierta vez Hilel le dió a un pobre que provenía originariamente de una familia de alcurnia un caballo y un esclavo, y un día que no encontró un esclavo para que le ayude él mismo ayudó al pobre. 

El Talmud sigue proveyendo diferentes historias sobre ricos que cayeron a la pobreza. Se nos cuenta que cierta vez un pobre fue a ver a Rav Nejemia y este le preguntó que solía comer y este le contesto: "vino y carne" (comidas muy costosas!). Paso seguido Nejemia lo invita a comer simples lentejas y el pobre muere. 

En otra historia similar un pobre viene frente a Rava y este le pregunta que solía comer y también le contesta "vino y carne". Rava, enojado, le pregunta: ¿No te das cuenta que estas siendo una carga para la comunidad? (ya que serán ellos los que deberán pagar por estas comidas costosas). A lo que el pobre enigmaticamente le contesta: "¿Acaso de ellos me alimentaré? ¡Dios será quien me mantenga!"

¿Qué piensan de estás historias? ¿Están de acuerdo con el principio general de que a un rico caído en la pobreza hay que intentar ayudarlo a que no pierda su estatus y sus "comodidades"? ¿Cuál es el racional de nuestros sabios? ¿Te parece justo?

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